Hoy tocaba Brenes. Le tenía ganas desde el año pasado que abandoné, ha sido la única carrera que no he terminado por cuestiones físicas, Suena el despertador a las 6:30, tengo 10 minutos de cortesía hasta que vuelva a sonar. Cuando de nuevo da el toque de diana me levanto y me asomo a la ventana. No me lo puedo creer de nuevo está lloviendo, igual que el año pasado. Me vuelvo a meter en la cama. No voy. No me apetece otra carrera mojado desde el principio, pero una mano me empuja y me levanto.
Como tengo tan mala cabeza siempre preparo las cosas antes de acostarme, y con todo siempre se me olvida algo. Salgo de casa sin desayunar por lo que tengo que buscar un bar imperiosamente, la buena noticia era que había dejado de llover. He quedado con Jon a las 7:30, por lo que si me apuro algo podré comer.
Ya en Brenes de nuevo empieza a llover, poco pero es agua y eso se traduce en barro, más barro porque se ha llevado toda la noche lloviedo, y eso para mis neumático trasero Larssen TT es como aceite y menos mal que cambié el delantero por unos High Roller. Recogemos los dorsales y nos vamos a desayunar, yo por segunda vez.
Nos preparamos y picamos para entrar en el cajón de salida y cinco minutos después de la hora prevista nos dan la salida neutralizada. Una leche si eso es una salida neutralizada yo soy ... José Antonio Hermida. Se va a 40 por hora y me quedo de los últimos, pero tampoco quería ir desde el principio con la lengua fuera. Cuando dan la salida oficial, lo primero que llega es una señora cuestesita, le tenía algo de miedo por el barro que solía acumularse pero la han reparado y no estaba tan mal. Yo, como siempre cuando llega una cuesta cojo mi ritmo y pa'rriba. Cuando pasaba por algún tramo con algo más de barro notaba como la rueda trasera se agarraba, con lo que me costaba algo más subir. Y en la bajadas tenía que controlar con la rueda delantera los derrapajes de la trasera.
Superada la primera dificultad, llegaba una larga bajada por carretera para entrar después en el trozo del Camino de Santiago. Es una trialera con muchas y profundas regueras. Al terminar cogimos un tramo rompepiernas, preparatorio para coger la cuesta de los toros. Es otra cuesta que te va machacando y termina de machacarte cuando crees que ya ha terminado y aún te queda un buen trayecto. Ya camino del embalse, siempre va tirando para arriba y de vez en cuando aparece algún repecho duro.
Desde la primera cuesta empecé a notar un dolor en la rodilla y es que ayer salí a rodar un poco y se me bajó el sillín. Me notaba algo raro en la bici pero no sabía que podía ser. Cuando me di cuenta ya era tarde. Me dolían las rodillas. Aún ahora me sigue doliendo.
Continuo con el relato. Se baja al embalse, se cruza y de nuevo a subir. Parece que no va terminar nunca. Superado este último escollo, ya todo lo que viene es rompepiernas. Un continuo sube-baja. Han cambiado el trayecto inicial por el barro y de nuevo pasamos por la primera cuesta, pero esta vez lo tenemos que bajar. Nos desvian a la izquierda para compensar los kilómetros que no hemos hecho. En una de las señalizaciones el viento está moviendo la flecha que debe indicar el camino. Primero derecha, después izquierda y como veo a un ciclista que va por la derecha, pues cojo la derecha. Error. Era la izquierda. Me he hecho unos quinientos metros para volver por mis pasos. Un kilómetro más. Ya solo me queda unos 8 kilómetros y voy echando ya el resto. el ciclista que también se equivocó va a mi rueda. El muy cabr...to no me da un solo relevo y cuando llegamos a meta el tío me esprinta para entrar antes que yo. Hay que joderse. Al final estoy contento, quería llegar antes de 6 horas y media y he terminado en 5:43 (tiempo oficioso). Pinta bien para Ronda.
Salida del sábado
Frecuencia Media: 143 ppm - Distancia 51,4 - Velocidad Media 21,1 km/h - Cadencia Media 75
Datos de la carrrera
Frecuencia Media: 154 ppm - Distancia 105,2 - Velocidad Media 18,5 km/h - Cadencia Media 77
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